Austria declaró este domingo zona catastrófica el estado federado de Baja Austria, el más grande y poblado del país, debido a las fuertes lluvias que provocaron históricas inundaciones, forzando la evacuación de miles de personas y causando la muerte de un bombero.
«Insto a todos los habitantes de Baja Austria en las regiones afectadas a prepararse para más lluvias e inundaciones, que permanezcan alerta y sigan las instrucciones de los servicios de emergencia. Esperamos desafíos de dimensiones históricas, especialmente en Waldviertel», advirtió la gobernadora de Baja Austria, Johanna Mikl-Leitner.
En Waldviertel, a unos 120 kilómetros al noroeste de Viena, las autoridades esperan la «inundación del siglo», ya que prevén que el río Kamp, afluente del Danubio, supere los niveles registrados en los últimos cien años, causando el desbordamiento del embalse de Ottenstein.
Un bombero falleció durante las labores de bombeo en Baja Austria, donde las fuertes inundaciones dejaron también a muchos residentes atrapados en sus hogares. «La situación en Baja Austria es dramática», aseguró Mikl-Leitner.
Más de 4.500 bomberos continúan las operaciones de rescate en edificios y vehículos atrapados bajo el agua, además de tareas de limpieza en todo el estado de Baja Austria, que rodea a la capital, Viena, y en el que residen cerca de dos millones de personas.
Además, varias carreteras quedaron inaccesibles ante las fuertes corrientes de agua y la caída de árboles, sobre todo en la zona central del estado, en las localidades de Melk, St. Pölten y Tulln, donde también se activó la alerta de Defensa Civil.
Preocupante situación en Viena
En Viena se registraron en las últimas horas más de 1.100 operaciones del cuerpo de Bomberos relacionadas con ráfagas de viento e inundaciones en sótanos, así como en casas en el oeste de la ciudad.
Desde el consistorio vienés instan a la población a quedarse en casa y evitar bosques y zonas cercanas a arroyos y ríos, especialmente cerca del Danubio, ante el riesgo de tormentas «muy fuertes» y la caída de árboles por el viento.
Debido a las constantes precipitaciones desde el viernes, varias líneas de metro de la capital fueron parcialmente suspendidas por el aumento del nivel del río Viena, que fluye por un lecho de hormigón entre edificios residenciales antes de desembocar en el canal del Danubio.
La ciudad también registró este sábado el acceso a sus cementerios y prohibió el baño en el Danubio, donde está activado el sistema de protección contra inundaciones, debido al fuerte temporal de lluvias que afecta a Austria y Europa central.
Fuente: Planeta 26