VIDEO | ¿Cómo afrontan las Pymes la crisis económica?

El gerente de C.P.A. Metalúrgica SRL, Pablo Valarolo, explicó que entre noviembre del año pasado y febrero de este año se vieron obligados a reducir su plantel de trabajadores en un 50% debido a la incertidumbre económica.

“Fueron 4 o 5 meses parados, lo que nos llevó a achicar el personal”, señaló. Sin embargo, expresó optimismo ante la leve recuperación que el sector comienza a experimentar.

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Valarolo recordó que “hasta febrero fue cuando se produjo la mayor reducción, porque no se trabajaba, no había precios, y eso afectaba mi capacidad de cotizar y comprar materiales. Estuvimos parados, pero desde hace tres meses comenzamos a notar algo de movimiento, lo cual es una señal positiva, aunque sabemos que esto es cíclico”.

La empresa, que está radicada en San Luis desde 1985, es de carácter familiar y cuenta con alrededor de 13 empleados. Se encuentra ubicada en ruta 7, cerca del desvío a Pescadores, casi frente al autódromo Rosendo Hernández.

En cuanto a los precios, Valarolo comentó que, tras la estabilización de los costos, “un cliente tuvo que asimilar que el material que antes compraba por $1.000 ahora costaba $100.000. Afortunadamente, ese aumento significativo ya fue asimilado y los precios del hierro, chapas y caños han permanecido estables”.

Sobre la recuperación de la empresa, explicó que “el cliente vuelve a invertir o se anima a realizar trabajos para su casa. Sin embargo, en este tiempo, muchas personas se quedan sin empleo, lo que hace más difícil mantener la estructura empresarial, especialmente cuando los gastos fijos, como la luz, son tan altos”.

El costo de la luz para la empresa pasó de una factura de $400 o $500 a $1.000.000, y luego subió a $1.800.000: “Ese es el monto mensual que pagamos, una cifra que tuvo un aumento muy grande. Ahora, ya nos acostumbramos y está estabilizado”, comentó.

A pesar de los desafíos, Valarolo expresó que se muestra optimista: “La actividad está comenzando a recuperarse y hablo con clientes de diferentes rubros que también están viviendo esta situación. Por eso, soy optimista, porque en los últimos meses hemos comenzado a levantarnos, y espero que el próximo año sea mejor”.

La empresa está cerrando el año con la expectativa de alcanzar un balance similar al del año anterior. “Con suerte, si empatamos, estaremos contentos. En este rubro, enero siempre es un mes lento, ya que los clientes aprovechan las vacaciones, lo que genera una disminución en la actividad. Veremos cómo se desarrolla la situación a partir de marzo”.