La renovada Secretaría de Inteligencia (SIDE) de Javier Milei ya se gastó el 80 por ciento de los 100 mil millones de pesos de fondos reservados que el Presidente le otorgó por decreto el 23 de julio pasado. En poco más de tres semanas, la central de espías, que en los papeles maneja Sergio Neiffert pero en los hechos controla el asesor presidencial Santiago Caputo, ya comprometió y devengó alrededor de 80 mil millones de pesos de los cuales no debe rendir cuenta alguna.
Todo esto, casi en tiempo récord y antes de la sesión convocada en Diputados por la oposición para voltear el polémico DNU que inyectó fondos millonarios. La información sobre la utilización exprés de gran parte de los fondos reservados fue revelada por el diputado de la Coalición Cívica, Maximiliano Ferraro, uno de los críticos más fuertes a la decisión del Gobierno libertarios de girar ese dinero a la SIDE.
«Para operaciones de la Side, ‘sí hay plata’: ya se ejecutaron 80 mil millones», aseguró el diputado de Elisa Carrió en su cuenta de X. «En solo tres semanas, se ejecutó el 80% de los 100 mil millones de pesos asignados a gastos reservados y secretos de la Secretaría de Inteligencia, fondos que el Gobierno se autoasignó a través de un DNU», explicó.
La renovada Secretaría de Inteligencia (SIDE) de Javier Milei ya se gastó el 80 por ciento de los 100 mil millones de pesos de fondos reservados que el Presidente le otorgó por decreto el 23 de julio pasado. En poco más de tres semanas, la central de espías, que en los papeles maneja Sergio Neiffert pero en los hechos controla el asesor presidencial Santiago Caputo, ya comprometió y devengó alrededor de 80 mil millones de pesos de los cuales no debe rendir cuenta alguna.
Todo esto, casi en tiempo récord y antes de la sesión convocada en Diputados por la oposición para voltear el polémico DNU que inyectó fondos millonarios. La información sobre la utilización exprés de gran parte de los fondos reservados fue revelada por el diputado de la Coalición Cívica, Maximiliano Ferraro, uno de los críticos más fuertes a la decisión del Gobierno libertarios de girar ese dinero a la SIDE.
«Para operaciones de la Side, ‘sí hay plata’: ya se ejecutaron 80 mil millones», aseguró el diputado de Elisa Carrió en su cuenta de X. «En solo tres semanas, se ejecutó el 80% de los 100 mil millones de pesos asignados a gastos reservados y secretos de la Secretaría de Inteligencia, fondos que el Gobierno se autoasignó a través de un DNU», explicó.
En ese sentido, el diputado de la Coalición Cívica reclamó que ningún bloque político puede ser contemplativo ni complaciente ante esta situación. «Es urgente declarar la invalidez y nulidad absoluta e insanable del DNU, no solo para frenar este derroche de recursos, sino también para que ninguna operación realizada bajo su amparo tenga validez y deba retrotraerse», sostuvo.
La información de Ferraro surge de un análisis detallado de los datos del sitio Presupuesto Abierto, que da cuenta de todos los ítems en los que se gastan los fondos públicos. Allí se muestra cómo el presupuesto de gastos reservados pasó de 650 millones de pesos iniciales a 103 mil millones, de los cuales casi 81 mil millones figuran en el rubro comprometido/devengado, un 78,29% del total.
La torta de gastos detallados es reveladora, ya que casi la mitad de dinero gastado por la central de espías corresponde a gastos reservados, sobre los cuales la SIDE no debe dar explicación alguna.
Los gastos reservados de la SIDE en gráficos del Presupuesto Abierto.
¿Puede la oposición rechazar un DNU sobre fondos que en rigor ya han sido usados? «Vamos a tener que declarar el rechazo y decir que es nulo de nulidad absoluta«, respondió Maximiliano Ferraro, ante la consulta de Clarín.
Así, al declararlo nulo de nulidad absoluta, esto quiere decir que el mismo nunca existió. «El Poder Legislativo, en este caso la Cámara de Diputados tiene el derecho de declarar que se han usurpado sus funciones legislativas«, citaron fuentes parlamentarias que están en la letra chica de los tecnicismos.
El detalle de los gastos de la Secretaría de Inteligencia.
«La Cámara de Diputados en cumplimiento de su deber de contralor constitucional en su faz ‘reparadora’, debe declarar la nulidad del DNU», completó Ferraro, que especificó que, ante una casi segura judicialización del tema, tienen que ser concretos y claros en la interpretación del tema de la nulidad absoluta del decreto de Milei.
La asignación de esa millonaria caja, dice el DNU, es por la «necesidad de asignar las partidas presupuestarias que permitan solventar, inicialmente, las acciones para la reorganización del Sistema de Inteligencia Nacional y el adecuado funcionamiento de los referidos organismos desconcentrados que lo integran», es decir, el Servicio de Inteligencia Argentino, la Agencia de Seguridad Nacional; y la Agencia de Ciberseguridad y la División de Asuntos Internos, creada como ente de control de los anteriores.
Esa millonaria suma despertó la bronca opositora en el Congreso que ya arbitró los medios necesarios para rechazar el DNU. La Coalición Cívica, que ahora denuncia que el 80% de esos 100 mil millones de pesos ya fueron usados por la secretaría que nuclea a los espías, y el bloque Innovación Federal, que lidera Miguel Ángel Pichetto, presentaron proyectos para anular ese decreto.
«Entendemos que es un DNU que no cumple los requisitos formales, ni sustanciales. Los requisitos formales quedaron incumplidos cuando no se aprecian las circunstancias fácticas de imposibilidad de funcionamiento del Congreso Nacional, los requisitos sustanciales quedan evidenciados frente a la ausencia de razonabilidad al ver que el DNU solo le otorga partidas presupuestarias a los gastos reservados y ni siquiera se ocupa de dotar a la estructura creada de los fondos necesarios para su funcionamiento», sentencian los diputados lilitos en su proyecto.
La asignación de esa millonaria caja, dice el DNU, es por la «necesidad de asignar las partidas presupuestarias que permitan solventar, inicialmente, las acciones para la reorganización del Sistema de Inteligencia Nacional y el adecuado funcionamiento de los referidos organismos desconcentrados que lo integran», es decir, el Servicio de Inteligencia Argentino, la Agencia de Seguridad Nacional; y la Agencia de Ciberseguridad y la División de Asuntos Internos, creada como ente de control de los anteriores.
Esa millonaria suma despertó la bronca opositora en el Congreso que ya arbitró los medios necesarios para rechazar el DNU. La Coalición Cívica, que ahora denuncia que el 80% de esos 100 mil millones de pesos ya fueron usados por la secretaría que nuclea a los espías, y el bloque Innovación Federal, que lidera Miguel Ángel Pichetto, presentaron proyectos para anular ese decreto.
«Entendemos que es un DNU que no cumple los requisitos formales, ni sustanciales. Los requisitos formales quedaron incumplidos cuando no se aprecian las circunstancias fácticas de imposibilidad de funcionamiento del Congreso Nacional, los requisitos sustanciales quedan evidenciados frente a la ausencia de razonabilidad al ver que el DNU solo le otorga partidas presupuestarias a los gastos reservados y ni siquiera se ocupa de dotar a la estructura creada de los fondos necesarios para su funcionamiento», sentencian los diputados lilitos en su proyecto.
El pedido de sesión especial para este jueves 15 de agosto fue impulsado por Encuentro Federal, la Coalición Cívica y el sector de la UCR que responde a Facundo Manes.
Fuentes parlamentarias aseguraron a Clarín que confían en tener el quórum necesario para llevar adelante la sesión, lo que representaría un revés en el Congreso para el oficialismo de La Libertad Avanza, que este miércoles tuvo que ceder al pedido del radicalismo de incluir en el temario financiamiento de las universidades nacionales para destrabar el inicio del debate.
En la oposición marcan que, cuando se haga la sesión, habrá el número suficiente de diputado sentados en sus bancas para rechazar el DNU que le giró 100 mil millones de pesos a la SIDE. Su poroteo más optimista indica que dirán presente: los 16 integrantes de Encuentro Federal, la mayoría de los 99 del bloque K, los 6 Lilitos, los 5 de la izquierda, los radicales de Manes y Lousteau, aunque no todos, y algunos de Innovación Federal.
Tal como informó Clarín, la apuesta está en el bloque de Unión por la Patria (UxP), que tiene la primera minoría, pero aportaría 95 diputados porque hay 4 que están ausentes por distintos motivos.
Por eso, la mirada quedó centrada en el aporte del radicalismo. Se especula que los diputados que responden a Facundo Manes como a Martín Lousteau terminarían siendo la llave para conseguir el quórum.
Desde el martes a la noche, el Gobierno viene presionando a los gobernadores para que sus diputados no participen en la sesión convocada en Diputados. Su intención es dilatar lo más posible el debate y para ello, en una repentina jugada, Martín Menem, presidente de la Cámara Baja, prometió a los diputados la conformación de la bicameral de Inteligencia, que sería citada para el próximo martes.
Así las cosas, la discusión por el DNU finalmente se pasó para la semana próxima, debido a que el debate de este miércoles promete extender hasta tarde. En la oposición afirman que la postergación no los afecta. Creen que inclusive podrían meter más temas espinosos para la gestión Milei en el debate.
Fuente: Clarín