La madrugada del domingo 13 de abril, L-Gante y su representante Maxi El Brother protagonizaron un escandaloso incidente a la salida de un boliche en Liniers, donde el cantante había ofrecido un show para la comunidad boliviana. Lo que comenzó como una actuación normal, terminó con una fuerte discusión que escaló hasta convertirse en una pelea física. Según los testimonios de los panelistas del programa Infama (América TV), L-Gante fue grabado golpeando y pateando a Maxi El Brother, además de dañar un vehículo estacionado en las cercanías.
El video, que rápidamente se viralizó, ha generado gran revuelo en las redes sociales y medios de comunicación, y se espera que sea usado como evidencia en una posible denuncia. “Nos están pidiendo los videos que tenemos porque ellos no pudieron tenerlos exclusivos”, explicó Marcela Tauro, conductora del programa. La gravedad del incidente ha abierto interrogantes sobre el futuro de la relación profesional entre el cantante y su manager, además de las implicaciones legales que podrían derivarse.
Aunque las causas exactas del enfrentamiento no han sido confirmadas, se han difundido diversas versiones sobre las tensiones que existían entre L-Gante y Maxi El Brother. Según rumores que circulan en el entorno del artista, el conflicto podría haber sido provocado por disputas económicas, problemas contractuales y diferencias personales acumuladas entre ambos.
Además, algunos medios han informado que L-Gante no habría querido realizar el show en primer lugar, lo que habría generado una discusión telefónica previa al incidente. Laura Ubfal, panelista de Infama, sugirió que el altercado no fue un hecho aislado: «Algo pasó. Nadie se agarra a trompadas porque sí», afirmó, haciendo alusión a la tensión acumulada en su relación.
El escándalo no solo podría afectar la carrera profesional de L-Gante, sino también su situación legal. Tras el incidente, Laura Ubfal advirtió que el cantante podría enfrentarse a consecuencias judiciales graves, dado su historial previo de problemas legales. “Esto lo puede llevar otra vez a la cárcel”, comentó, refiriéndose a las posibles repercusiones legales derivadas del altercado.
Aún se desconoce si el vehículo dañado en el incidente pertenece a Maxi El Brother, a L-Gante o a un tercero ajeno al conflicto, lo que podría complicar aún más la situación.
El altercado ocurrió horas después de que L-Gante regresara de Colombia, donde había estado de vacaciones. En una entrevista previa al incidente, el cantante se mostró relajado, incluso bromeando sobre su relación con Wanda Nara, su actual pareja. “Indescifrable”, fue la respuesta de L-Gante cuando le preguntaron sobre su relación, destacando que no sentía la necesidad de aclarar su situación sentimental.
Sin embargo, su apariencia física no pasó desapercibida para los panelistas, quienes notaron un evidente cambio en su aspecto. Karina Iavícoli señaló que L-Gante se veía «demacrado», contrastando con su usual imagen mediática. Según la misma periodista, la madre del cantante habría mencionado que él planeaba “volver a las bases” y “estudiar”, lo que sugiere que el artista podría estar atravesando un momento de crisis personal y profesional.
