En un video compartido en redes sociales, el meteorólogo Lucas Berengua informó que fue reintegrado al Servicio Meteorológico Nacional (SMN) después de haber sido despedido el 28 de marzo como parte de las medidas de reducción de personal público llevadas a cabo por el gobierno del presidente Javier Milei.
«Quiero utilizar este medio para contarles a todos que en el curso de las últimas horas han sucedido eventos que han concluido en mi renovación del contrato y reincorporación en el SMN», reveló en un video difundido por las redes sociales de la Unión Personal Civil de la Nación (UPCN).
«Por un lado se trató de trámites y gestiones realizadas a través de UPCN con las autoridades del ministerio de Defensa, quienes primero se comunicaron conmigo para indicar que mi renovación y continuidad estaba en gestión», agregó.
Además, detalló que el director del SMN, Alejandro de la Torre, fue quien se lo confirmó. «Hoy ya me encuentro restablecido en mi puesto de trabajo y comenzando con mis tareas laborales habituales», afirmó.
En el tuit titulado «El gremio y la lucha por los puestos de trabajo», el sindicato destacó que «se logró el objetivo».
La polémica se inició el jueves pasado, cuando el meteorólogo se enteró por altavoz de la suspensión de su contrato en medio de la ola de despidos en la administración pública implementada por el gobierno nacional.
«Yo no era un ñoqui. Tengo 21 años de carrera dentro del SMN porque entré a trabajar en el 2003. Era uno de los voceros del organismo. Fueron años de estar encargado del organismo y nadie me puede llamar de esa manera», se había quejado en una entrevista radial.
En otras declaraciones, se refirió específicamente a la manera en la que lo echaron: «A mí no me mandaron un mail como a la mayoría, no. Me llamaron a una oficina y mi directora, que no quiso venir a dar la cara, me lo dijo por un altavoz. Me despidió por teléfono. Todo fue muy cruel».
La rescisión del contrato de Berengua fue uno de los despidos más estruendosos dentro de los más de 11.000 que ya llevó a cabo la administración de Milei.
Aquel 28 de marzo, el vocero del SMN se retiró aplaudido por una multitud que se había congregado para despedirlo al grito de «no se va, Lucas no se va».
Fuente: El Canciller