Juan Román Riquelme, el presidente de Boca que fue uno de los grandes protagonistas de los incidentes que se vivieron en el duelo ante Gimnasia y Esgrima La Plata en los cuartos de final de la Copa Argentina, contó algunos detalles sobre lo sucedido en Rosario pero también se llevó todas las miradas de los medios internacionales por su postura dentro de las tribunas para evitar un fuerte desastre entre los hinchas y la Policía del lugar.
Entre gases lacrimógenos y balas de goma, Román se hizo presente en el lugar e intentó, en primera persona, hacer entrar en razón a los hinchas que buscaban la confrontación con sus pares del Lobo. Al alertar la presencia del ídolo Xeneize, muchos cambiaron su postura y comenzaron a darle una mano para intentar calmar la tensa situación y permitir que el encuentro, que estaba por comenzar el segundo tiempo, se reanudara con «normalidad».
Según contó el periodista Gustavo Grabia de TyC Sports, las dos personas con quienes se ve dialogando a Riquelme para que entren en razón son las manos derecha de Rafael Di Zeo y Marcelo Aravena, dos de las tres patas de poder donde se asienta la barra. El primero se llama Fabián Kruger, le dicen Topadora, y estuvo preso junto a Di Zeo por acciones de la barra 15 años atrás. El otro que quedó patente en las imágenes es Fernando Gatica, alias Lana, histórico de la facción Lomas de Zamora también con prontuario importante y nombre fuerte en el mundo de los violentos.
