El tiramisú es uno de los postres más populares del mundo. Originario de Italia, combina café, galletitas y una mezcla cremosa de queso que lo convirtió en el favorito de muchas familias. Con el auge de las redes sociales, cada vez más usuarios comparten versiones adaptadas de recetas tradicionales, pensadas para diferentes estilos de vida.
Una receta viral en redes sociales
La tiktoker @Pulicocina publicó una reversión del tiramisú clásico, eliminando el gluten y el azúcar, pero conservando todo su sabor. Esta propuesta casera ganó popularidad rápidamente gracias a su facilidad de preparación y sus ingredientes saludables.
Ingredientes para 4 porciones
- 1/2 taza (60 g) de harina de almendras
- 2 huevos
- 2 cucharadas o 6 sobres de edulcorante
- Un chorrito de leche de almendras
- 1 cucharadita de esencia de vainilla
- 1/3 taza (40 ml) de café fuerte
- 1 taza (200 g) de queso crema
- 1/2 taza (100 g) de yogur griego o más queso crema
- 2 cucharadas de cacao amargo o chocolate sin azúcar (opcional)
Paso a paso: cómo hacer tiramisú sin gluten ni azúcar
1. Preparar la base del bizcochuelo
En un bol, mezclar la harina de almendras, los huevos, el edulcorante, la leche y la vainilla. Cocinar la mezcla en una taza en el microondas durante 1 minuto y medio a 2 minutos. También puede hacerse al horno o en sartén hasta que esté bien cocido.
2. Desmenuzar y humedecer
Una vez que el bizcochuelo esté frío, desmenuzarlo en trozos y colocarlo en un bowl con el café. Dejar que absorba bien el líquido.
3. Preparar la crema
Mezclar el queso crema con el yogur griego y un poco más de edulcorante. Esta será la capa cremosa que reemplaza al tradicional mascarpone.
4. Armar el postre
En copas o frascos, colocar una capa de bizcochuelo con café, seguida por la crema. Repetir las capas hasta completar. Finalizar con cacao amargo espolvoreado o chocolate sin azúcar rallado.
Las redes sociales, especialmente TikTok, se han transformado en una fuente de inspiración para recetas fáciles y accesibles. Las versiones más saludables de los clásicos de la cocina no solo ganan adeptos por su sabor, sino también por su practicidad y por adaptarse a distintos tipos de alimentación.