La policía de Múnich suspendió este miércoles la apertura del Oktoberfest tras descubrir explosivos en una vivienda incendiada en el norte de la ciudad. El evento, que reúne a millones de visitantes cada año, reabrirá a partir de las 17:00 horas mientras continúan las investigaciones.
El Oktoberfest de Múnich, considerado el mayor festival cervecero del mundo, sufrió un cierre temporal luego de que la policía encontrara artefactos explosivos durante la inspección de un edificio residencial incendiado.
El operativo comenzó tras un siniestro en una vivienda al norte de la ciudad, donde una persona murió y otra permanece desaparecida. Según las autoridades, el incendio fue intencional y se originó por una disputa familiar.
Durante la revisión del inmueble, equipos especializados localizaron explosivos y mecanismos trampa, lo que activó la intervención de unidades de desactivación. La policía confirmó que se investigan todas las hipótesis, incluidas posibles conexiones con otros puntos de Múnich, entre ellos el recinto de Theresienwiese, sede del Oktoberfest.
“Actualmente se están evaluando vínculos con otros lugares de la ciudad”, señalaron fuentes policiales en declaraciones oficiales.
Riesgo para el público
Aunque las autoridades insistieron en que no existe peligro inmediato para los asistentes, se decidió retrasar la apertura del festival como medida preventiva. Los organizadores confirmaron a través de su web oficial que la entrada al predio se reanudará a las 17:00 horas.
El festival, inaugurado el 20 de septiembre y con cierre previsto para el 5 de octubre, recibe cada año a millones de turistas y locales. Ante el hallazgo, la prioridad de las autoridades es garantizar la seguridad de los visitantes y descartar cualquier amenaza adicional.
Los organizadores recomendaron consultar fuentes oficiales para obtener información actualizada sobre accesos y horarios.