La industria de la música en vivo atraviesa uno de sus momentos más complejos. Según advirtió Cristian Merchot, presidente de la Asociación Civil de Managers Musicales Argentinos (ACMMA), la venta de entradas cayó drásticamente durante el segundo semestre de 2025 en todo el país. La combinación de inflación, pérdida de poder adquisitivo y el auge de recitales internacionales está dejando en una situación crítica a las bandas medianas y emergentes.
Un segundo semestre marcado por la crisis económica
Merchot explicó que desde julio se registra un fuerte retroceso en la asistencia a shows locales, fenómeno que contrasta con el primer semestre del año y con los niveles de actividad de 2023 y 2024.
“La situación económica golpeó de lleno. El público que sigue a nuestras bandas pertenece, en gran parte, a la clase trabajadora, y muchos llevan más de un año y medio sin aumentos reales”, señaló el dirigente. A esto se suman incrementos en alquileres y servicios, que obligan a los productores a subir precios mientras el público debe recortar gastos recreativos.
Según datos mencionados por ACMMA, el consumo en ocio cayó un 54%, generando una competencia inesperada entre un ticket para un show y una salida económica como comer una pizza.
Bandas medianas y pequeñas, las más perjudicadas
Entradas que se compran a último momento
Merchot indicó que las bandas de menor escala enfrentan un escenario crítico: las entradas se venden recién en la última semana previa al show, algo que no ocurría desde hace años. Este comportamiento responde a la incertidumbre económica y al freno general en el gasto familiar.
El impacto de los recitales internacionales
El referente de ACMMA comparó la situación actual con lo ocurrido en los años ’90. Giras internacionales de gran escala —como los regresos de Oasis o las tres fechas agotadas de AC/DC en River Plate— concentran una enorme porción del dinero disponible del público y “secan” la demanda para los artistas locales.
A pesar de que la Ley de la Música pide incluir una banda nacional telonera o abonar una multa del 12% de la recaudación, Merchot denunció maniobras por parte de grandes productoras que obligan a los artistas a ceder el total o parte de sus ingresos por SADAIC para poder participar como opening act.
“Es una práctica abusiva hacia artistas que están construyendo su carrera”, afirmó.
Productoras que evitan multas y quitan derechos de autor
Merchot señaló que algunas productoras exigen a los músicos devolver el 50% e incluso el 100% de lo recaudado por SADAIC a cambio de permitirles abrir shows internacionales.
De esta manera, además de esquivar la multa del 12%, terminan recortando el ingreso del artista nacional.
“Estamos hablando de empresas multimillonarias que no deberían quitarle derechos a quienes recién empiezan”, cuestionó.
El rol de ACMMA en defensa de los artistas
Una organización para profesionalizar la industria
Fundada en 2016, la Asociación Civil de Managers Musicales Argentinos busca fortalecer la cadena de valor de la música en vivo, equiparar beneficios con otras industrias culturales y brindar herramientas de formación a nuevos profesionales.
Merchot destacó que detrás de cada show trabajan cientos de personas: prensa, técnicos, asistentes, transporte, hoteles, comercios gastronómicos y más.
“Un concierto activa a más de dos mil trabajadores en un estadio. Es una industria enorme que muchas veces no se dimensiona”, explicó.
