La expresidenta Cristina Fernández de Kirchner protagonizó una curiosa escena este domingo 26 de octubre, luego del triunfo de La Libertad Avanza (LLA) en las elecciones legislativas nacionales. Mientras el espacio liderado por Javier Milei celebraba su avance en todo el país, la exvicepresidenta fue vista saludando y bailando en el balcón de su casa de Recoleta, en medio de la sorpresa de sus seguidores.
Triunfo libertario en las legislativas
Los comicios definieron la renovación de 127 bancas en Diputados y 24 en el Senado, en una jornada marcada por el impacto político del escándalo que rodeó a José Luis Espert, quien renunció a su candidatura por LLA días antes de la votación.
Aun así, el espacio libertario logró consolidar un resultado histórico, imponiéndose incluso en la provincia de Buenos Aires, un bastión tradicional del peronismo.
En el distrito bonaerense, La Libertad Avanza obtuvo el 41,53% de los votos, apenas un punto por encima de Fuerza Patria, la lista encabezada por Jorge Taiana, que alcanzó el 40,83%.
Con estos números, los libertarios se aseguraron 17 bancas en Diputados —una más que el peronismo—, mientras que la izquierda quedó tercera con un 5% y dos escaños.
Cristina Kirchner, entre gestos y visitas políticas
Mientras los militantes peronistas se concentraban en la puerta de su domicilio en San José 1111, la expresidenta, que cumple prisión domiciliaria por la causa Vialidad, salió al balcón para saludar y bailar brevemente ante las cámaras.
Horas antes, Jorge Taiana se había acercado a visitarla tras la derrota electoral del peronismo bonaerense.
El gesto de Cristina llamó la atención, no solo por el contexto político adverso, sino también por el simbolismo del momento: un sector de su fuerza interna la había cuestionado semanas antes por la estrategia electoral que enfrentó al gobernador Axel Kicillof, quien decidió no desdoblar las elecciones provinciales, pese a la oposición de la exmandataria.
Tensión interna en el peronismo tras los resultados
El revés en Buenos Aires profundizó las diferencias dentro del oficialismo. Cristina Kirchner había advertido que unificar las elecciones podía debilitar la performance del peronismo frente al avance libertario. Sin embargo, Kicillof mantuvo su postura, buscando fortalecer la imagen provincial.
El resultado terminó dando la razón a las advertencias de la exvicepresidenta, que observó cómo Milei consolidó su poder político en uno de los territorios clave del país.


