Paloma Fernández, la joven de 18 años que se arrojó de un auto en movimiento para escapar de su captor, recibió el alta médica del Hospital Central “Dr. Ramón Carrillo” el miércoles.
Ingresó al shockroom del centro de salud el 9 de febrero con graves heridas provocadas por su expareja, Cristian Gregorio Suárez, de 42 años. Tras permanecer en terapia intensiva, pasó a cuidados intermedios hasta su recuperación.
Las autoridades del hospital destacaron que su mejoría fue posible gracias a un trabajo intenso y coordinado del equipo médico. La joven fue sometida a una cirugía de urgencia, en la que se le realizó una resección de intestino delgado y rafia uterina debido a una herida de arma blanca. También presentaba múltiples escoriaciones y hematomas. Durante su internación, recibió atención interdisciplinaria de los servicios de cirugía, ginecología, terapia intensiva, clínica médica, psicología, psiquiatría y asistencia social.
El agresor continúa detenido
Mientras Paloma se recupera con su familia, Suárez fue trasladado al Servicio Penitenciario Provincial con prisión preventiva por cuatro meses, mientras avanza la investigación en su contra.