La decisión del Gobierno de nombrar al teniente general Carlos Alberto Presti como ministro de Defensa generó fuertes críticas de organismos de derechos humanos y referentes de la memoria histórica.
La voz de Francisco Ledesma
Francisco Ledesma, hermano de Pedro Valentín Ledesma, desaparecido durante la dictadura, rechazó la designación y advirtió sobre sus implicancias institucionales.
“Cometeríamos un gran error de ver esta designación como un hecho aislado, esto forma parte de un plan de acción contra los derechos humanos”, afirmó.
Un militar en actividad al frente de Defensa
Presti, hasta ahora jefe del Estado Mayor del Ejército, se convierte en el primer militar en actividad en ocupar el cargo de ministro de Defensa desde el retorno de la democracia en 1983. La medida generó alarma en organismos de derechos humanos, que la consideran un retroceso en los consensos democráticos construidos en las últimas décadas.
Críticas por negacionismo y riesgo de indultos
Ledesma sostuvo que la designación se inscribe en una política de reivindicación de la dictadura.
“La sensación es que esto es un fuerte ataque a la democracia. El Gobierno ya viene con el negacionismo, la teoría de los dos demonios, que no eran 30 mil los desaparecidos. Hay que preguntarse si el próximo paso no es volver ahora en diciembre a los indultos para los condenados por delitos de lesa humanidad”, advirtió.
Antecedentes y silencio político
El militante recordó que Presti es hijo de un represor y cuestionó que nunca haya repudiado el accionar de las fuerzas de seguridad durante el proceso militar. También criticó el silencio de los partidos políticos tradicionales, a los que calificó como “vacíos” y sin pronunciamientos sobre la designación.
“Los organismos de derechos humanos estamos solos en esto”, concluyó.


