Los hinchas de Racing pasaron casi 10 horas en el estadio de Peñarol por una medida de seguridad uruguaya. Al salir, insultaron a Diego Milito y a dirigentes del club, en un clima de tensión tras el duelo por la Copa Libertadores.
Una jornada que debía ser de fútbol y pasión terminó en tensión, cansancio y bronca para los hinchas de Racing Club. Tras el partido ante Peñarol por los octavos de final de la Copa Libertadores, los simpatizantes albicelestes permanecieron casi diez horas dentro del estadio «Campeón del Siglo», por una medida de seguridad impuesta por las autoridades uruguayas. Cuando finalmente pudieron salir, se encontraron con la presencia de Diego Milito y otros dirigentes en el campo de juego, lo que desató una oleada de insultos desde un grupo importante de la hinchada.
Diez horas en el estadio: una medida extrema
Las autoridades policiales uruguayas dispusieron que los hinchas de Racing ingresaran al estadio desde muy temprano, con el objetivo de evitar incidentes antes y después del partido. Sin embargo, tras el pitido final, no les permitieron salir de inmediato.
Los simpatizantes tuvieron que esperar más de tres horas adicionales en la tribuna, sin acceso a servicios básicos, mientras las autoridades controlaban la salida ordenada de los hinchas locales. En total, muchos de ellos estuvieron cerca de diez horas dentro del predio, desde el ingreso hasta el desalojo final, que se extendió hasta entrada la madrugada.
La protesta de los hinchas
Cuando los hinchas comenzaron a salir del estadio, vieron a Diego Milito, presidente del club, junto a otros miembros de la comisión directiva, caminando sobre el campo de juego, en una zona restringida. Ese gesto, interpretado como una falta de empatía con su sufrimiento, desató el enojo colectivo.
Desde las tribunas y los accesos, se escucharon fuertes insultos:
“¡Milito, boludo, andate a la mierda!”
“¡No somos tu show, no nos uses!”
“¡Estuvimos diez horas adentro y vos acá paseando!”
El malestar era evidente: muchos hinchas habían viajado desde Argentina con sus familias, incluyendo niños y adultos mayores, y consideraron que el trato recibido fue deshumanizado.
La respuesta de Diego Milito
Desde el campo de juego, Milito dio una breve declaración a los medios presentes, en la que expresó su preocupación:
“Es una locura realmente. Nosotros no nos vamos a ir hasta que se vaya el último hincha de Racing. Nunca vimos algo semejante. Hay parte de la comisión directiva en la tribuna, acompañando”.
Sin embargo, sus palabras no calmaron los ánimos. Fuentes del club confirmaron que se emitirá un comunicado institucional de fuerte tono contra las autoridades uruguayas por la gestión del operativo de seguridad, que calificaron como “desproporcionada e inhumana”.
¿Qué pasó con el operativo de seguridad?
Fuentes policiales uruguayas justificaron la medida por “protocolos de contención de hinchadas visitantes en instancias de alto riesgo”. Sin embargo, no hubo incidentes graves antes, durante ni después del partido, lo que pone en duda la necesidad de una medida tan extrema.
En otros partidos internacionales, incluso con mayor tensión, los hinchas visitantes han sido evacuados de forma ordenada sin restricciones prolongadas.
