El vestuario de River en La Bombonera fue un hervidero después de la derrota en el Superclásico frente a Boca. El clima era tan tenso que Marcelo Gallardo volvió a suspender la conferencia de prensa y dejó las declaraciones oficiales en manos de los jugadores. Uno de los que habló fue Juan Fernando Quintero, quien terminó envuelto en una fuerte discusión con un periodista en zona mixta.
El mediocampista colombiano comenzó visiblemente molesto ante una consulta sobre los “argumentos futbolísticos para pensar en salir campeón y clasificar a la Copa Libertadores”. Su respuesta fue tajante:
“Tú haces preguntas muy especiales… Yo defiendo a mis compañeros, a un escudo grandísimo. He hecho historia con este club. Vivimos un presente muy difícil, pero tampoco les damos de comer a cosas que no importan”.
El intercambio subió de tono cuando un periodista sugirió que el plantel le había “soltado la mano al entrenador”. Ahí, Quintero se encendió:
“Él dijo que le soltamos la mano al entrenador. Son percepciones. Si yo le digo a tu jefe cómo trabajas tú, ¿qué dice? Me parece que no eres profesional por esta situación. Cada uno tiene su profesión y se respeta. Nadie pone en duda tu aptitud como ser humano, pero en esas preguntas siempre está el morbo. Discúlpame, porque aquí nadie pone en duda eso, ¿sabes?”.
Ya enojado, el colombiano cerró con una frase contundente:
“Me dolió, pero nunca te falté el respeto. Mi trabajo fue bueno, regular o malo, pero jamás le haría la cama a un entrenador. Excavar donde no hay y meterle carbón a la cosa no tiene nada que ver. Ahora tenemos una oportunidad, ojalá Dios quiera ganemos y cuando quedemos campeones no digan nada”.
Pese al enojo, Juanfer también dejó espacio para la autocrítica y el reconocimiento del mal momento que atraviesa el equipo:
“Quiero pedirle disculpas a la gente. Sabemos la situación que estamos pasando, nunca nos había pasado. A veces tenemos que darnos cuenta de dónde estamos y mirar qué errores cometemos para estar a la altura”.
Y agregó con tono reflexivo:
“Nadie quiere perder un clásico, tocamos fondo. En mi caso, levanto la cabeza, nos queda otro juego. Siempre hay que pensar en positivo. Tenemos otra oportunidad contra Vélez y debemos hacer una autocrítica”.
Finalmente, Quintero cerró con una mirada sobre la crisis futbolística del equipo:
“El fútbol es subjetivo, nadie tiene la verdad. Si hubiéramos metido las jugadas claras en el segundo tiempo sería diferente. Es una seguidilla muy difícil, no está a la altura de River. Al menos yo nunca viví algo así en este club. Es bueno que esto pase para ver quién saca la jerarquía y la rebeldía”.


