Este miércoles, la Fiscalía N° 1 presentó cargos ante el Juzgado de Garantía N° 2 contra William Alexander Lagos, quien está siendo investigado por un robo ocurrido el pasado 15 de noviembre en el barrio 30 Viviendas Sur, en perjuicio de Daniel Sosa, un empleado de la empresa de energía eléctrica Edesal.
De acuerdo con la narración del fiscal Francisco Assat, el incidente tuvo lugar alrededor del mediodía, cuando Sosa y un compañero acudieron a verificar un medidor en la zona. En ese momento, Lagos ingresó al vehículo de la empresa y sustrajo la billetera de uno de los trabajadores. Tras ser descubierto, intentó huir, pero fue alcanzado por ambos empleados. Esto dio lugar a una persecución que culminó en un forcejeo, durante el cual, según la acusación, Lagos sacó un cuchillo.
Durante el altercado, una persona no identificada arrojó una piedra que impactó en la cabeza de Sosa, provocándole un grave hundimiento de cráneo que requirió intervención quirúrgica de urgencia en el Hospital Ramón Carrillo.
Al día siguiente, la Fiscalía ordenó un allanamiento en la vivienda de Lagos, ubicada en el barrio Néstor Kirchner, donde se encontraron varias tarjetas y documentos pertenecientes a las víctimas, además de ropa coincidente con la que se observó en las imágenes de las cámaras de seguridad.
Pese a contar con una orden de detención, Lagos permaneció en fuga hasta el 2 de diciembre, cuando fue identificado por personal de la División de Robos y Hurtos (DRIM) en las inmediaciones de calle Mendoza, en el marco de otra denuncia por sustracción de un celular. El dispositivo fue hallado entre sus pertenencias al momento de su aprehensión.
Con el respaldo de pruebas, como actas policiales, entrevistas, material de cámaras de seguridad y los resultados del allanamiento, la Fiscalía imputó a Lagos por robo calificado por las lesiones graves causadas a la víctima y por el uso de arma, en concurso real con encubrimiento.
Además, el Ministerio Público solicitó su prisión preventiva por 90 días, argumentando riesgos procesales, tales como el peligro de fuga, debido a los antecedentes penales de Lagos y su conducta evasiva posterior al hecho, así como el riesgo de entorpecimiento del proceso, dado el temor manifestado por testigos del barrio a represalias.
La jueza Agustina Dopazo, luego de escuchar a las partes, aceptó los cargos y acordó una medida cautelar de prisión preventiva por 75 días. La audiencia continuará en las próximas semanas para definir el curso de la investigación.


