La Oficina del Colegio de Jueces de la ciudad de San Luis ha fijado las fechas del 29 y 30 de abril de 2026 para el juicio oral contra un hombre de 35 años, imputado por múltiples delitos de abuso sexual en perjuicio de su hija menor de edad y otra adolescente, sobrina de una expareja.
La noticia se conoció luego de que la fiscal de Género N° 1, María Delia Bringas, solicitara y obtuviera la prórroga de la prisión preventiva del acusado. La funcionaria argumentó que la medida es indispensable para evitar riesgos procesales, dada la gravedad de los hechos, la alta pena provisoria solicitada y el contexto intrafamiliar en el que se desarrollaron los abusos. El defensor adjunto de Niñez, Nahuel Lede, adhirió a este pedido.
Nueve años de abusos y amenazas
Según la denuncia, el patrón de ultrajes contra su propia hija comenzó en 2014, cuando la niña tenía solo seis años, y se extendió hasta marzo de 2023.
La fiscal Bringas detalló que los abusos ocurrieron en reiteradas ocasiones, principalmente cuando la menor visitaba a su padre tras la separación de sus progenitores. El imputado utilizaba amenazas para garantizar el silencio de la víctima: le decía que, si revelaba lo sucedido, «se quitaría la vida o le haría algo a la progenitora de la niña». Fue en marzo de 2023 que la menor pudo relatar los hechos a su madre, lo que derivó en la posterior denuncia.
La segunda víctima es una adolescente de 12 años, sobrina de una expareja del imputado, cuyos abusos habrían ocurrido presuntamente entre 2022 y 2023. La fiscal narró que el acusado, aprovechando la convivencia en el mismo predio, ingresaba al departamento de la menor para manosearla.
La calificación legal y el pedido de pena
La Fiscalía atribuye al imputado diversos delitos en concurso real, lo que implica que cada hecho se considera independiente y la pena se suma:
- Respecto a su hija: Abuso sexual simple agravado por el vínculo y la convivencia; además de dos hechos de abuso sexual con acceso carnal (uno de ellos también agravado por el vínculo y la convivencia).
- Respecto a la segunda víctima: Abuso sexual simple agravado por la convivencia, y un hecho de abuso sexual simple sin agravantes.
Con base en la escala penal del Código Penal (que prevé de 8 a 50 años en estos casos), la fiscal Bringas solicitó provisoriamente la aplicación de una pena de treinta años de prisión para el acusado.


