El semifreddo, que en italiano significa “semifrío”, es un exquisito postre helado de origen italiano conocido por su textura suave y cremosa. Esta delicia culinaria combina la riqueza de una mousse con la frescura de un helado, ofreciendo una experiencia sensorial única que cautiva los paladares más exigentes. El semifreddo se distingue por su preparación relativamente sencilla y su versatilidad en términos de sabores y presentaciones.
Ingredientes
4 yemas de huevo, 100?g de azúcar, 1 cucharadita de extracto de vainilla, 300?ml de crema para batir (con al menos 35% de grasa), 100?g de frutas frescas como fresas o frambuesas (opcional), galletas o bizcochos, para decorar (opcional).
Procedimiento
Separa las yemas de los huevos y colócalas en un tazón grande. Descarta las claras o guárdalas para otro uso.
Si decides usar frutas frescas, lávalas, sécalas y córtalas en trozos pequeños. También puedes utilizar frutas congeladas si lo prefieres.
Agrega el azúcar y el extracto de vainilla a las yemas en el tazón.
Bate las yemas y el azúcar con una batidora de mano o un batidor eléctrico a velocidad media-alta hasta que la mezcla esté pálida, espesa y haya duplicado su volumen. Debería tomar aproximadamente 5-7 minutos.
En otro tazón grande, bate la crema para batir hasta que forme picos suaves. Es importante no batir en exceso para evitar que la crema se convierta en mantequilla.
Con movimientos suaves y envolventes, incorpora la crema batida (nata) a la mezcla de yemas y azúcar. Es relevante hacerlo con delicadeza para no perder el aire incorporado en la crema, lo que dará al semifreddo su textura ligera y esponjosa.
Si estás usando frutas frescas, añádelas a la mezcla de semifreddo y mézclalas suavemente para distribuirlas de manera uniforme. Este paso es opcional, pero añade un delicioso toque de frescura y color al postre.
Forra un molde para pan de 23×13 cm con papel de aluminio o papel film, dejando suficiente sobrante en los bordes para poder envolver el semifreddo más tarde.
Vierte la mezcla de semifreddo en el molde preparado y alisa la superficie con una espátula.
Cubre el semifreddo con el exceso de papel de aluminio o papel film y colócalo en el congelador durante al menos 4-6 horas, o hasta que esté firme.
El semifreddo es increíblemente versátil en términos de sabores. Se puede preparar con una variedad de ingredientes, como frutas frescas, frutos secos, chocolate, café o licores, lo que permite una amplia gama de opciones para satisfacer diferentes gustos y preferencias.
Cuando esté listo para servir, retira el semifreddo del congelador y déjalo reposar a temperatura ambiente durante unos minutos.
Desmolda el semifreddo tirando suavemente del papel de aluminio o papel film. Corta el semifreddo en rebanadas y sírvelo en platos individuales, decorado con frutas frescas adicionales o galletas desmenuzadas si lo deseas.
Fuente: Mdz
