La investigación de la Justicia por el triple femicidio en Florencio Varela continúa luego de las declaraciones de los acusados y el testimonio de la dueña de la casa, Magalí Celeste González Guerrero, donde ocurrieron los crímenes. En las últimas horas se sumó un video, en el que se puede ver a los implicados juntarse en un local de comidas a planear el asesinato.
Se publicó una grabación donde hay un encuentro clave entre Alex Ydone, a quien supuestamente las jóvenes le robaron la droga por la que inició la “venganza”, y Manuel Valverde, el tío sicario de Pequeño J. Esto ocurrió en un local de comida peruana en Villa Domínico.
Ydonde operaba el tráfico de estupefacientes en la zona de Flores. El periodista Diego Gabriele contó en C5N que «este hombre es realmente un pesado, que manejaba el tráfico interno, movía entre 15 y 20 kilos de cocaína por semana, desde un domicilio en la zona de Flores hasta la 1-11-14».
Según lo revelado por el comunicador, el almuerzo duró 45 minutos y planificaron cómo iban a llevar a las chicas con la excusa de un encuentro social. Magalí Celeste González Guerrero indicó que estaban esperando en el living a oscuras con guantes de látex y con parlantes puestos.
En cuanto le consultaron cómo se veían las chicas, contestó: «Bajaron sonrientes, se las veía como engañadas, que venían a una fiesta». En su declaración relató qué la droga que tenía Ozorio se la daba Pequeño J, que son todos vendedores de drogas, y que tienen un departamento en la zona de Pompeya, y que no pudieron ir ahí ese día con las chicas porque estaba en reconstrucción.
Por su parte, Ariel Giménez reveló que lo convocaron para que lleve el parlante para poner la música y que no se escuchen los gritos de dolor de las víctimas. Cabe destacar que González era la dueña de la casa: “Sé que a las chicas que llevó a mi casa las conocía de antes porque dijo que eran amigas y que no podían ir a su departamento porque estaba en remodelación”.
Según reconstruyó Florencia Ibáñez, Alex era el dueño de la droga que desató la masacre. Habló de 300 kilos robados, y no de 30 como había declarado inicialmente Celeste, otra de las imputadas.
Fuente: C5N