El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, aseguró que Hamás “está aceptando cosas muy importantes” en las conversaciones por un alto el fuego en Gaza. Las negociaciones se desarrollan en Egipto con la participación de Israel, Qatar y mediadores internacionales, bajo un plan de 20 puntos impulsado por la Casa Blanca.
Las delegaciones de Israel, Hamás, Estados Unidos, Qatar y Egipto se reunieron en la ciudad egipcia de Sharm el Sheij, a orillas del mar Rojo, para reactivar el proceso de paz en la Franja de Gaza. El objetivo principal es alcanzar un alto el fuego y liberar a los rehenes que aún permanecen en manos del grupo islamista.
Durante una conferencia en la Casa Blanca, Donald Trump afirmó que “Hamás está aceptando cosas muy importantes” y expresó su optimismo respecto a los resultados del encuentro. “Creo que vamos a llegar a un acuerdo. Llevan años intentando lograrlo, pero esta vez estamos más cerca que nunca”, declaró.
El plan presentado por Washington contempla tres pilares:
- Fin de la guerra y alto el fuego inmediato.
- Liberación total de los rehenes a cambio de prisioneros palestinos.
- Formación de un gobierno de transición en Gaza, supervisado por Trump y el ex primer ministro británico Tony Blair.
Además, incluye la desmilitarización del enclave y la posibilidad de abrir negociaciones futuras para un Estado palestino, punto que Israel rechaza de manera firme.Según Al-Qahera News, medio cercano a la inteligencia egipcia, el diálogo se centra en la preparación de un intercambio humanitario: la liberación de 48 rehenes —entre ellos varios con ciudadanía argentina— a cambio de unos 2.000 prisioneros palestinos, incluidos 250 condenados a cadena perpetua.
Los mediadores egipcios y qataríes trabajan en el diseño de un mecanismo seguro para llevar a cabo el intercambio. Sin embargo, fuentes citadas por The Israel Times advierten que Hamás teme perder influencia si libera a los cautivos demasiado pronto.
Entre los rehenes aún retenidos figuran los argentinos Eitan Horn y los hermanos Ariel y David Cunio, además del cuerpo de Lior Rudaeff, también argentino.
La comitiva estadounidense está encabezada por el enviado especial Steve Witkoff y el asesor Jared Kushner, y la israelí por el ministro de Asuntos Estratégicos Ron Dermer. Por parte de Hamás participa su jefe negociador, Jalil al Haya, quien sobrevivió a un intento de ataque israelí en Doha el pasado septiembre.
Las negociaciones continuarán el martes por la tarde, según confirmó un funcionario egipcio que pidió mantener el anonimato. Las partes habrían acordado ya la mayoría de los términos de la primera fase del plan, que incluye el alto el fuego y la liberación de cautivos.
Aunque el clima es de moderado optimismo, el proceso enfrenta importantes obstáculos políticos y militares. Trump aseguró que mantiene “líneas rojas” en las conversaciones, como el desarme total de Hamás, condición indispensable para sellar la paz definitiva.
“Si no se cumplen ciertos puntos, no habrá acuerdo”, advirtió el mandatario. Pese a ello, la Casa Blanca confía en que este nuevo intento siente las bases para un acuerdo duradero en Gaza tras dos años de guerra y miles de víctimas civiles.