El ataque aéreo afectó principalmente a la localidad de Domodédovo, en las afueras de Moscú, donde varios drones impactaron en un aparcamiento, provocando un incendio en el que más de 20 vehículos fueron completamente destruidos. Entre las víctimas mortales se encuentran un guardia de seguridad de 38 años, que trabajaba en el aparcamiento, y un hombre de 50 años, quien sufrió heridas graves y falleció poco después de ser ingresado en el hospital.
El gobernador Vorobiov expresó que la prioridad en este momento es brindar toda la asistencia necesaria a las víctimas y sus familias. Además, anunció que se otorgarán un millón de rublos (aproximadamente 11.300 dólares) a los familiares de los fallecidos como compensación.
Suspensión temporal de vuelos en Moscú y otras ciudades
Como consecuencia del ataque, las autoridades rusas decidieron suspender temporalmente las operaciones en los aeropuertos de Moscú, Nizhni Nóvgorod y Yaroslavl. Esta medida de seguridad se tomó para garantizar la protección de los vuelos y la infraestructura aérea tras los impactos de los drones.
El ataque con drones en Moscú resalta la creciente tensión y las amenazas a la seguridad en la región, con un saldo trágico de muertes y heridos. Las autoridades continúan investigando el origen del ataque, mientras se lleva a cabo la recuperación de los daños materiales y se brindan ayudas a las víctimas.
