VIDEO | ¿Cómo Replicar el Modelo de Ruta N en San Luis? Inversión y Plasticidad Cerebral

La ciudad de Medellín, durante mucho tiempo estuvo asociada con la violencia y el narcotráfico, sin embargo, ha experimentado una notable transformación gracias a Ruta N. Este innovador ecosistema tecnológico ha impulsado la economía y mejorado la calidad de vida de sus habitantes. San Luis aún tiene la capacidad de replicar y adaptar esta exitosa experiencia a través de la Universidad de La Punta, el gobierno provincial, el sector privado y el sector bancario.

En 2010, cuando se creó Ruta N, el gobierno de Medellín destinaba un significativo 5% de su PIB a defensa, seguridad y justicia debido al Plan Colombia, mientras que la inversión en ciencia, tecnología e innovación apenas alcanzaba el 0,411% del PIB. Sin embargo, la comunidad y las autoridades locales reconocieron el potencial de la ciudad para liderar en innovación y tecnología. Así nació Ruta N, con el propósito de canalizar recursos hacia la ciencia y la tecnología para abordar retos sociales y económicos.

Ruta N es una entidad sin fines de lucro propiedad de la Alcaldía de Medellín, una empresa pública y una empresa privada de telecomunicaciones. Esta estructura híbrida, pública pero regida por el derecho privado, busca articular empresas, universidades, el Estado, la sociedad civil y el sector bancario para fomentar un entorno de innovación.

Este polo tecnológico basó su estrategia en cuatro pilares: 1. Desarrollo del talento humano con capacitaciones que respondan a las reales necesidades de la economía del conocimiento.2 Habilidades de emprendedurismo para mejorar la competitividad y productividad en el diseño organizativo. 3 Capital Financiero: Disponibilidad de fondos para empresas y emprendedores de la banca local e internacional .4. Capital Social: Creación de un ecosistema de innovación colaborativo.

Adicionalmente Ruta N actúa como intermediario entre la oferta y la demanda de capital, logrando apalancar aproximadamente 70 veces el monto invertido en fondos de investigación. Los emprendimientos apoyados deben ser financieramente auto sostenibles, estar validados (con estándares) y tener entre 2 y 5 años de existencia.

Replicación del Modelo en San Luis: San Luis tiene una infraestructura adecuada para adaptar el modelo de Ruta N.    La Universidad de La Punta, el gobierno provincial y el sector privado son actores clave, pero aún falta una inversión significativa del sector bancario. Aquí surge una pregunta crucial: ¿cuándo volverá a dar créditos este sector? Además, es necesario considerar la creciente influencia de las Fintech y las billeteras virtuales, como Mercado Pago, que ya juegan un rol importante en la economía.

San Luis tiene la posibilidad de explotar miles de emprendimientos, pero esto no estaría sucediendo. Esto nos lleva a considerar un enfoque psicológico para comprender mejor las barreras actuales.

Psicología y empleabilidad:  La plasticidad cerebral, o neuroplasticidad, es la capacidad del cerebro para cambiar y adaptarse a nuevas experiencias, aprendizajes y entornos. Esta capacidad es crucial para el desarrollo de habilidades y la adaptación a nuevas situaciones, incluyendo el empleo. Sin embargo, la falta de empleo o el empleo precarizado pueden afectar negativamente esta plasticidad, dificultando la empleabilidad.

El desempleo o el empleo precarizado, si se prolongan, pueden reducir las oportunidades de estimulación cognitiva. Sin actividades laborales que desafíen y desarrollen habilidades, el cerebro puede perder flexibilidad y capacidad para adaptarse a nuevos aprendizajes y situaciones laborales. Además, los ambientes laborales estresantes y la incertidumbre pueden aumentar los niveles de cortisol, una hormona del estrés que, en exceso, deteriora la plasticidad cerebral.

El desempleo también puede llevar a una disminución de la autoestima y la motivación, factores importantes para el aprendizaje y la adaptación. La plasticidad cerebral es impulsada por la motivación y la participación activa en el aprendizaje. Sin empleo, la confianza en la capacidad de aprender y adaptarse puede disminuir, afectando negativamente la plasticidad cerebral.

Recapitulando tenemos gran parte de los elementos clave para la Implementación en San Luis de un polo tecnológico exitoso a saber:

  1. Universidad de La Punta como Centro de Innovación: Similar a Ruta N, la Universidad de La Punta lidera el desarrollo de programas educativos avanzados en ciencia y tecnología, alineados con las demandas del mercado.
  2. Apoyo del Gobierno Provincial: El gobierno de San Luis debería ofrecer más y más incentivos fiscales y logísticos para atraer empresas tecnológicas.
  3. Colaboración con el Sector Privado e Industrial: Establecer alianzas con empresas con objetivos concretos y a mediano plazo para potenciar reales oportunidades de empleo.

No contamos con dinero del sector bancario nacional ni extranjero con lo que se podría estimular a las Fintech y las billeteras virtuales para promover financiación de startups y proyectos innovadores mediante préstamos y otros productos financieros flexibles.

Tampoco contamos con equipos que aborden problemáticas relacionadas con la plasticidad neuronal en la vuelta al mercado del trabajo, que puedan implementar quizá coaching y técnicas cognitivas para fortalecer habilidades humanas y mejorar la empleabilidad.

Sin embargo, si lo pensamos bien el vaso está bastante lleno. Es cuestión de tomar buenas decisiones articuladas.

Conclusión

La experiencia de Ruta N en Medellín demuestra que es posible transformar una ciudad fragmentada, a través de la innovación y la colaboración.   San Luis, con su infraestructura está en una buena posición para replicar este modelo. Con la participación de la Universidad de La Punta, el gobierno provincial, el sector privado y las Fintech o billeteras virtuales, y un enfoque en las capacidades blandas, nuestra provincia podría convertirse en un epicentro de desarrollo tecnológico en Argentina. La clave está en tomar decisiones articuladas y poner de verdad la mirada en el futuro.