El Papa Francisco permanece hospitalizado desde hace tres semanas en tratamiento por una bronquitis bilateral. Aunque su pronóstico sigue siendo reservado, fuentes vaticanas indicaron que ha tenido una evolución estable y que no ha presentado episodios de insuficiencia respiratoria.
Según el informe médico del Vaticano, el Pontífice ha sido sometido a oxigenoterapia de alto flujo y ventilación mecánica no invasiva para facilitar su recuperación. Además, continúa con sesiones de fisioterapia respiratoria y motora activa.
Actividades del Papa durante su hospitalización
A pesar de su estado de salud, el Papa no ha dejado completamente sus funciones. El miércoles por la mañana sostuvo una conversación telefónica con el padre Gabriel Romanelli, párroco de la Sagrada Familia de Gaza, y en la tarde alternó descanso con trabajo.
Durante el Miércoles de Ceniza, Francisco participó en el rito de bendición de la Santa Ceniza y recibió la Eucaristía, mostrando su compromiso con sus deberes religiosos a pesar de la hospitalización.
Pronóstico y expectativas
El Vaticano ha mantenido cautela respecto a la evolución del Papa, sin confirmar aún una fecha de alta. No obstante, el hecho de que continúe desempeñando algunas tareas es una señal positiva sobre su recuperación.