La Policía de Nueva Galia investigó un caso de presunto maltrato animal tras una denuncia difundida en redes sociales que involucraba a un ciudadano de apellido Lucero.
El operativo, encabezado por la Subcomisario Sonia Liesegang y personal policial, incluyó visitas al domicilio del denunciado y la identificación del verdadero propietario del equino, un hombre de apellido Vilarchi, quien confirmó haber retirado el animal a su campo tras tomar conocimiento de la situación.
El equino, una hembra de tres años, fue inspeccionada en el establecimiento de Vilarchi.
La revisión, realizada por la Subcomisario Liesegang y personal judicial y científico, determinó que el animal se encuentra en buen estado de salud, con un peso adecuado y sin lesiones graves, solo presentando escoriaciones superficiales que no afectan su bienestar.
Aunque no se encontraron evidencias de maltrato significativo, las autoridades continuarán con las actuaciones correspondientes en caso de ser necesario.
