Este viernes, tras confirmarse el fallecimiento del papa Francisco a los 88 años, el arzobispo Jorge García Cuerva celebrará una misa conmemorativa en la Catedral Metropolitana de Buenos Aires, a partir de las 8:30. La ceremonia se realizará en el lugar donde Jorge Mario Bergoglio sirvió durante más de dos décadas.
La muerte del papa Francisco conmovió a fieles de todo el mundo. En Argentina, su país natal, la primera manifestación oficial de la Iglesia fue la convocatoria a una misa en su memoria, organizada por el arzobispo de Buenos Aires, Jorge García Cuerva.
La ceremonia se celebrará este viernes a las 8:30 en la Catedral Metropolitana, el mismo lugar donde Bergoglio ejerció su ministerio pastoral durante más de 20 años, antes de ser elegido como pontífice en 2013.
Francisco, nacido como Jorge Mario Bergoglio, falleció a los 88 años tras enfrentar una prolongada enfermedad. Aunque recientemente había recibido el alta médica tras 38 días internado en el hospital Gemelli, su salud continuaba siendo delicada. Estaba convaleciente en la residencia de Santa Marta, donde finalmente se produjo su deceso en la madrugada de este viernes, a las 2:30 hora argentina.
Su última liturgia en la Catedral de Buenos Aires fue en 2013, justo antes de partir al Vaticano para participar del cónclave que elegiría al sucesor de Benedicto XVI. Aunque prometió regresar, su agenda papal y la coyuntura internacional impidieron que pudiera volver a la Argentina.
A pesar de su delicado estado de salud, Francisco ofició la misa de Pascua semanas antes de su fallecimiento, en la que dejó un mensaje firme y característico de su pontificado:
«No puede haber paz sin libertad de religión, libertad de pensamiento, libertad de expresión y respeto por las opiniones de los demás.»
Con estas palabras, ratificó su compromiso con los valores democráticos y el diálogo interreligioso, aspectos centrales de su papado.
