El arroz es un alimento con origen en Asia. Aproximadamente el 20% de la ingesta calórica mundial está relacionada con este grano. Es decir, que se trata de uno de los alimentos más importantes del planeta. Más de 3.500 millones de personas dependen del arroz como alimento básico de su alimentación diaria.
El arroz se ha convertido en el comodín de varias comidas, por su capacidad para adaptarse a comidas frías o calientes y dulces o saladas. Además es fácil y rápido al cocinar. Algunas personas creen que el consumo de este grano incluye azúcar y temen que aumente el riesgo de alterar los niveles de glucemia, especialmente en personas con diabetes.
Sin embargo, el arroz no contiene azúcar, según aclararon a Infobae médicos y miembros de la Sociedad Argentina de Diabetes. Aunque su consumo debería ser moderado en personas con diabetes, y preferir el arroz integral. Aquí van las respuesta a 7 preguntas sobre el arroz.
¿El arroz contiene azúcar?
“No. El arroz es un cereal y contiene almidón, que es un hidrato de carbono complejo. Pero no contiene azúcar”, dijo Carolina Gómez Martín, médica especialista en medicina interna y diabetes, codirectora de Cendia, en Concordia, Entre Ríos, e integrante de la comisión directiva de la SAD, en diálogo con Infobae.
Pero hay que tener en cuenta que después de que una persona realiza el proceso digestivo, todas las comidas que tengan hidratos de carbono se transforman en glucosa, que es la principal fuente de energía del organismo, acotó Gómez Martín.
“El arroz en sí mismo no contiene azúcar añadida. Sin embargo, tiene carbohidratos que se descomponen en azúcares simples a través de la digestión. Por lo tanto, aunque el arroz no contiene azúcar añadida, puede contribuir a elevar los niveles de glucosa en sangre del paciente con diabetes”, señaló el médico Hugo Sanabria, a cargo de prevención cardiovascular en el Instituto Cardiovascular de Buenos Aires (ICBA) y miembro del comité científico del congreso de la SAD.
¿Cómo evitar que el arroz se convierta en azúcar?
“Tanto el arroz como las pastas deben consumirse al dente. Cuando se consumen pasados o muy cocidos su absorción es más rápida y eso favorece que aumente el nivel de glucemia en el organismo humano”, comentó Gómez Martín.
Cuando el arroz se cocina, y se enfría, cambian las propiedades del almidón y se lo denomina almidón retrógrado, que es más resistente a la digestión y por lo tanto se retarda su absorción, puntualizó.
“Es recomendable cocinar, enfriar y volver a calentar para consumir el arroz ya que el impacto en la glucemia se menor. Es una recomendación habitual para las personas con diabetes”, dijo.
¿Se puede comer arroz sin límites?
“El consumo de arroz no está prohibido en personas con diabetes, pero es recomendable que las cantidades sean moderadas en estos pacientes”, según Sanabria.
“Se debería elegir preferentemente arroz integral y acompañarlo con fibras como las verduras de hojas verdes. Esas acciones permiten moderar el impacto en la glucemia del paciente con diabetes”, agregó.
¿Qué diferencia hay entre el arroz y el azúcar añadido?
El arroz es un hidrato de carbono complejo. Mientras que el azúcar que se suele usar en los hogares es un hidrato de carbono simple, que se absorbe mucho más rápido, con un proceso digestivo mucho más corto, de acuerdo con la experta consultada.
¿Qué aporta el arroz?
El arroz es un cereal que posee gran cantidad de nutrientes, entre los cuales se destaca su contenido de hidratos de carbono, vitaminas y minerales.
Posee cantidades significativas de hidratos de carbono que brindan energía suficiente a nuestro organismo, especialmente al cerebro. Entre las vitaminas y minerales que proporciona el arroz figuran: vitamina D, vitaminas del complejo B y minerales como calcio y hierro. Las cantidades de estos nutrientes son mayores en el arroz de tipo integral.
La vitamina D contribuye al desarrollo óseo y prevención de enfermedades relacionadas con los huesos ya que colabora en la absorción del calcio. Las vitaminas del complejo B son un conjunto que ayudan en diversas funciones del organismo. Colaboran en la obtención de energía por parte de los alimentos que se consumen, la formación de glóbulos rojos, así como también en el buen funcionamiento del aparato digestivo, la piel y el sistema nervioso.
Este tipo de vitaminas son hidrosolubles. Esto significa que migran a lugares donde haya agua. En este sentido, durante la cocción del arroz, se deberá optar por incorporar solo el agua necesaria para su cocción o consumir el caldo sobrante para poder aprovechar al cien por cien todas sus vitaminas del complejo B.
¿Cuál es la diferencia entre el arroz integral y el arroz común?
De la variedad de arroces que existen, se pueden clasificar en arroz refinado y arroz integral. El primero carece de “pericarpio” o “cáscara de salvado”. En cambio, el arroz integral permanece con esta cáscara, una razón por la cual este último posee un color más oscuro que el arroz refinado.
La calidad nutricional de estos dos arroces es diferente. El integral, al poseer su cáscara proporciona los nutrientes que ella contiene, como vitaminas, minerales y fibra. Mientras que el blanco está desprovisto del pericarpio y no posee sus nutrientes.
¿El arroz tiene gluten?
El arroz es un alimento libre de gluten. Esto significa que es apto para personas con enfermedad celíaca. Sin embargo, siempre será necesario cerciorarse que el arroz sea libre de gluten mediante la visualización en su envase del sello otorgado por la autoridad sanitaria y leyenda “libre de gluten” y “Sin TACC” en las proximidades de la denominación de venta.
Al igual que todo alimento de origen vegetal, el arroz no contiene colesterol. Asimismo, el arroz integral posee grandes cantidades de fibra alimentaria, la cual colabora en el correcto funcionamiento del sistema digestivo, reduce el riesgo de enfermedades intestinales y colabora en la reducción del colesterol LDL (colesterol “malo”).
Fuente: Infobae