La fiscal de Instrucción N°2 de la segunda circunscripción, Daniela Torres, reveló que los allanamientos realizados esta semana a locales comerciales se enmarcan en una investigación por el robo de celulares a más de 100 personas.
El megaoperativo se realizó el martes de esta semana y consistió en allanamientos a 22 comercios de Villa Mercedes. En 20 de ellos encontraron dispositivos buscados.
Torres indicó que la investigación se inició en diciembre. Los procedimientos fueron requeridos al Juzgado de Garantía durante los meses de enero y febrero.
La fiscal también detalló que gracias al número de IMEI de los dispositivos, y con la colaboración de las compañías de telefonía celular, lograron determinar que muchos de los aparatos denunciados como robados ya habían tenido cambio de titularidad.
“Las víctimas están determinadas y son más de 100”, indicó la fiscal.
En el marco de la pesquisa, los investigadores acudieron a algunos de los locales allanados, para preguntar por repuestos o accesorios para determinados aparatos. Ahí descubrieron que, en realidad, esos comercios no reparaban teléfonos, sino que eran “una ventana o un espejo”.
“Constantemente entraba y salía gente de esos locales, pero cuando íbamos nosotros nunca nos satisfacían lo que buscábamos. Era claro que los que entraban y salía todo el tiempo eran para la compra o venta de los artefactos”, señaló Torres.
Pese a los allanamientos y el secuestro de los dispositivos, no hay detenidos en la causa. La fiscal remarcó que no se pueden determinar responsabilidades aún, porque “los locales tiene tres, cuatro o cinco empleados, que permanentemente van cambiando”.
En una conferencia de prensa luego de los operativos, el jefe del Departamento Investigaciones de Villa Mercedes, Germán Gómez, remarcó: “Esto no se trata de una sola causa, estamos investigando varias causas, lo que hemos propuesto con la Dirección General, así también con la Jefatura de Policía y con el Ministerio Público Fiscal, es no solamente perseguir a la persona que comete el delito, sino a quienes reducen estos elementos, porque sabemos que si no habría reducidores o compradores no habría delitos”.
