A qué proyectos beneficia la aprobación del RIGI

Entre las múltiples reformas que incluye la ley Bases, impulsada por el Gobierno de Javier Milei y aprobada por el Senado, está el Régimen de Incentivos a las Grandes Inversiones (RIGI). Pese a los cambios en el texto, la iniciativa busca potenciar la llegada de capitales a distintos sectores claves de la economía, como la energía y la minería. 

El RIGI fue uno de los puntos claves tanto en las negociaciones del Gobierno con los bloques «dialoguistas«, así como también durante el debate de la ley Bases. Para garantizar los votos a favor, el oficialismo concedió modificaciones.

De esta forma, el RIGI mantuvo su piso de base para las inversiones de USD 200 millones, pero se limitó al sector forestoindutria, turismo, infraestructura, minería, tecnología, siderurgía, energía, petróleo y gas. En la redacción anterior figuraba «cualquier sector».

También se especificó que cada desarrollo tendrá que proponer al menos un 20% de la totalidad de inversión en proveedores de organizaciones nacionales, «siempre y cuando la oferta de proveedores locales se encuentre disponible y en condiciones de mercado en cuanto a precio y calidad».

El Gobierno destacó que las empresas de energía y minería tienen anuncios por unos USD 100.000 millones para la próxima década, con un gran foco en Vaca Muerta. 

La construcción de gasoductos y oleoductos que transporten gas y petróleo no convencional a puertos exportadores y zonas alejadas de yacimientos hidrocarburíferos son otras de las obras que podrían verse favorecidas con el RIGI, junto a la construcción de nuevos puertos exportadores.

Las obras vinculadas al litio también aparecen en la lista de proyectos de interés para las inversiones extranjeras, al igual que las vinculadas al desarrollo de energía verde, como la construcción de parques solares y eólicos. 

También se incluyen líneas de alta tensión para abastecer con energías renovables a grandes industrias, pozos petroleros y de gas en  Vaca Muerta, plantas de tratamientos y minas en la alta montaña. Además de aeropuertos y emprendimientos hoteleros y gastronómicos para fomentar el turismo y los negocios.

Qué proyectos potenciará el RIGI

Entre los cinco grandes proyectos energéticos y mineros que se verán favorecidos por el RIGI, la suma de inversiones ronda los USD 100.000 millones. De ese total, el 75% corresponde a los no convencionales (USD 8.569 millones), con foco principal en el petróleo (85%). En tanto, solo el 25% se destinará para bloques convencionales (USD 2.792 millones).

El megayacimiento no convencional de Vaca Muerta puede ser el gran capitalizador de las nuevas leyes aprobadas por el Congreso. En lo que va de 2024, ya se superaron las 7.600 etapas de fractura y se espera cerrar el año con 18.000.

YPF en el principal centro de atracción de inversiones, con USD 4.400 millones, seguido de PAE con USD 1.600 millones, Vista con USD S1.000 millones, Tecpetrol con USD 500 millones, Shell con USD 400 millones y CGC con USD 360 millones, entre otras. 

En materia de energía, el principal proyecto atado al RIGI es la planta de Gas Natural Licuado (GNL) de YPF y Petronas, llamado ARGLNG, con una inversión inicial de USD 360 millones en partes iguales.  Petronas confirmó el inicio de la construcción de una unidad flotante de procesamiento de GNL, para operar en conjunto con YPF y poder exportar a partir de 2027 el gas de Vaca Muerta. El acuerdo con Petronas prevé comenzar a exportar GNL a partir de 2027.

A esto, se suma la perforación del primer pozo de hidrocarburos offshore en la Cuenca Norte del Mar Argentino, que podría generar inversiones por USD 40.000 millones y la contratación de más de 100 mil trabajadores.

Lo impactante de este proyecto es que podría tener un potencial incluso superior a Vaca Muerta. Pero hay que sacar el fluido del fondo del mar, a 4.000 metros de profundidad, algo que Argentina nunca desarrolló a gran escala. El proyecto podría sumar unos 200.000 barriles diarios, por un valor de USD 35.000 millones.

A estas iniciativas se suma el Proyecto Fortescue, que busca convertir a Río Negro en un polo mundial de exportador de hidrógeno verde, lo implicaría inversiones por unos USD 10.000 millones. Se podrían producir más de 2 millones de toneladas anuales de energía limpia. Representa la demanda de unos 15 millones de hogares.

En materia minera, los proyectos barajados incluyen extracciones de cobre que generarían inversiones por más de USD 20.000 millones. La proyección de la Cámara Argentina de Empresas Mineras (CAEM) estimó que en una década la demanda de cobre en el mundo puede crecer a casi 10 millones de toneladas, y recomienda que la Argentina se posicione a gran velocidad para satisfacer a GRAN parte de esos compradores.

Fuente: BAENEGOCIOS