¿Por qué se celebra Nochebuena el 24 de diciembre y Navidad el 25?

Todos los 24 de diciembre, las familias católicas se juntan en familia a celebrar la Nochebuena y luego, cuando el reloj marca las 12am comparten la Navidad.

Nochebuena: ¿Cuál es su origen?

Para los cristianos, se celebra la Nochebuena y seguidamente la Navidad porque se cree que Jesús nació entre la medianoche y la madrugada del 25 de diciembre, entonces se festeja desde horas antes la llegada al mundo del Mesías.

En la Biblia no se especifica la fecha exacta del nacimiento de Jesús, pero desde el año 380 se celebran las misas en la víspera de Navidad por este nacimiento tan esperado.

La víspera del nacimiento es el día 24 del último mes del año, y eso tiene influencia en su denominación como Nochebuena. El nombre tiene que ver con el día que es especial y augura buenos momentos; al ser la noche del nacimiento, se considera como “buena noche”.

Cada 25 de diciembre se celebra en Argentina y en diferentes partes del mundo la Navidad, una de las festividades más importantes del año. Esta fecha fue elegida para conmemorar el nacimiento de Jesucristo, por lo que es una fiesta religiosa.

Hoy en día, su importancia se centra en los festejos, las reuniones familiares y el hecho de que sea una gran época de consumo.

¿Cuál es el significado de la Navidad?

La Navidad es una festividad de origen cristiano que sirve para conmemorar el nacimiento del niño Jesús, ocurrido en Belén. Se celebra cada 25 de diciembre en la Iglesia católica, algunas comunidades protestantes, la Iglesia anglicana y en la mayoría de las Iglesias ortodoxas.

El término de Navidad procede del latín nativtas, nativtis, cuyo significado es nacimiento. Se utiliza para hacer referencia al día del nacimiento de Jesús y también se usa para designar todo el periodo posterior hasta alcanzar el Día de Reyes.

Cuál es el origen de la Navidad

Tanto el origen como lo que representa la Navidad es diferente según la festividad de cada lugar. El 25 de diciembre es una fecha muy significativa desde la antigüedad, ya que se celebraba durante el solsticio de invierno acontecido en el hemisferio norte, es decir, a partir del 21 de diciembre.

Aún así, la adopción del 25 de diciembre se realizó varios siglos después, comenzando en el año 221 por el testimonio de Sexto Julio Africano sobre la fecha de nacimiento en Judea, así como el calendario litúrgico filocaliano del año 354 después del nacimiento de Cristo.

Pese a que se suele hacer referencia al origen religioso y cristiano de la Navidad, también es necesario hablar del origen pagano de la festividad. Incluso tras el nacimiento del niño Jesús, la celebración se siguió conmemorando en torno a la figura implantada por los romanos de Saturno.

De esta manera, los romanos celebraban la fiesta conocida como Saturnalia, un festival en el que honraban al dios Saturno y que representaba el solsticio de invierno. Solían ser fiestas de excesos y en las que se invertía el orden social establecido: no se castigaban estos excesos, las cortes de justicia quedaban cerradas y se llevaban a cabo intercambios de regalos pequeños, los cuales recuerdan a los actuales presentes navideños.

Cuando la religión cristiana logró imponerse en el Imperio Romano, el rey Justiniano fue el encargado de declarar la Navidad como una fiesta cívica. Pero, durante la Edad Media, estas fiestas navideñas se convirtieron en fechas para beber y estar de fiesta desde la primera hora del día hasta la noche.

Fuente: Ámbito