Descartan que la droga que tomó la nutricionista haya sido adulterada y la familia espera una pericia clave

El caso de Florencia Yturrioz, la nutricionista que murió tras asistir a una fiesta electrónica en Mar del Plata, entra en terreno de definiciones. Por estas horas, los investigadores sostienen la hipótesis sobre un consumo voluntario de drogas sintéticas y los esfuerzos de la Justicia pasan por encontrar a la persona que le suministró los estupefacientes.

Esto último interesa, por un lado, para despejar las sospechas de la familia, que es que alguien, doblegando su voluntad, le introdujo droga en el vaso. Por otro lado, los investigadores analizan la responsabilidad eventual que se le podría atribuir a un tercero: en el expediente, tramitado por la Fiscalía 4° como averiguación de causales, se mantienen bajo suspenso las circunstancias que rodearon la muerte.

“La investigación muestra un consumo voluntario de drogas”

Hasta el momento, no se sabe si la joven sufrió una sobredosis. Tampoco está claro si en el lapso entre que salió del boliche y regresó descompensada al departamento siguió consumiendo estupefacientes. Sí hay indicios -según confió una fuente de la investigación a TN- que descartarían que la droga que mató a la nutricionista haya sido adulterada.

“No es una hipótesis que manejemos por el momento. Aunque estamos esperando que se completen las pericias, no se reportaron otros casos que permitan suponer que tomó una droga adulterada”, mencionó un investigador, y continuó: “Los elementos muestran hasta acá un consumo voluntario. Estamos tratando de individualizar a quien le facilitó la sustancia”.

“Insuficiencia respiratoria por intoxicación con drogas”, sentenció el informe preliminar de la autopsia en relación con la causa de muerte de Yturrioz. “Es lo que tenemos ad referéndum del resultado final de las pericias”, retomó la fuente.

Desde este martes, el examen toxicológico y el hispatológico serán trascendentales para determinar la cantidad de droga consumida por la víctima y la existencia de patologías previas que puedan tener -o no- relación con la muerte.

La investigación impulsada por el fiscal Fernando Berlingeri no pudo corroborar, a través de los testigos, que la nutricionista haya repetido el consumo de drogas desde las 7.30, cuando estuvo unos minutos en el departamento que alquilaba con amigas en la Avenida Colón 1426, hasta que regresó a las 10.40 con los síntomas que luego desembocaron en su muerte.

Según consta en la historia clínica, Florencia tenía anfetamina y metanfetamina en sangre -compatibles con el consumo de éxtasis- en su ingreso al Hospital Interzonal General de Agudos (HIGA). Sus amigas la vieron convulsionar y llamaron a una ambulancia que la trasladó de urgencia hasta el centro de salud. Allí se le colocó asistencia mecánica respiratoria hasta que, a las 16.40, los médicos confirmaron la muerte.

El relato de los testigos: “Bebía mucha agua y estaba hiperactiva”

El sábado 13, en la última noche antes del regreso, Florencia y tres amigas fueron a bailar al balneario Mute, cerca del Faro de Punta Mogotes. En un momento de la noche, según declaró una de las jóvenes, Yturrioz se separó del grupo. Incluso llegó más tarde y sola al departamento que compartían.

Una vez allí, sus amigas decidieron quedarse, pero la nutricionista quiso extender la salida. Según las cámaras de seguridad, salió a la calle y, a los pocos metros, ingresó en una panadería para consultar si alguno de los presentes sabía sobre algún “after” en la zona.

Unos jóvenes que compraban facturas en el comercio le respondieron que no, y la invitaron a tomar mate con ellos a la playa Las Toscas. “Bebía mucha agua. De hecho, pidió que le cargaran dos veces una botella”, sostuvo uno de los testigos que se presentó voluntariamente a declarar en la UFI N°4. Además, mencionó que la joven “estaba hiperactiva y con verborragia”, que “se movía todo el tiempo” y que “bailaba y revoleaba los brazos para todos lados”.

Durante todo ese tiempo a la nutricionista no la vieron consumir drogas, y los análisis de sangre revelaron que tampoco bebió alcohol en toda la noche.

Yturrioz se había recibido hace casi dos años de licenciada en Nutrición en la Universidad Nacional de La Plata (UNLP) y contaba con estudios de antropometría con certificación ISAK 1 y 2. En paralelo, cursó el profesorado de Educación Física y daba clases.

La joven, que además era profesora de educación física, cultivaba una vida sana y daba consejos sobre alimentación y hábitos saludables en su consultorio de la ciudad de La Plata y en Instagram. Su espacio en Instagram -nutriendohabitos.fy- tenía más de 4000 seguidores.

“Queremos que nos den una respuesta sobre lo que pasó con Florencia, que era una persona absolutamente sana, comprometida con la alimentación, muy solidaria. La quería todo el mundo, estaba desarrollando un trabajo vinculado a la alimentación y el autismo. No podemos creer que esto nos pase a nosotros”, manifestó un familiar en las horas que siguieron a la muerte, y se mostró convencido de que la víctima “tomó algo que le hizo muy mal”.

En medio del dolor, su novio le dedicó un mensaje. “Hoy es el día más feo de mi vida, hoy me toca despedirte y decirte hasta pronto porque estoy seguro de que nos vamos a volver a ver mi nutri, mi negra, mi cuchuflina y podría seguir todo el día por la forma en que nos tratábamos, nos reíamos y lo felices que éramos siempre para adelante juntos”, escribió Santiago Fernández en Instagram.

En la publicación, que está acompañada por ocho fotos de ambos, siguió: “Volá alto, amor y enséñales a todos por donde estés lo increíble que sos. Mándanos mucha fuerza y guíanos en este nuevo camino. Te vamos a extrañar mucho, amor. Te voy a recordar así como en las fotos. Brillá y guianos, mi ángel”.

Fuente: TN