La sesión de este jueves del Concejo Deliberante de San Luis se levantó, por falta de quórum y la concejala del bloque Justicialista, Agustina Gatto, dijo que es la tercera vez que “no dejan hablar a la gente”.
El oficialismo decidió abandonar el recinto por una protesta de militantes de la Comunidad LGBT+, que quisieron expresarse y por eso caducó la sesión.
La concejal indicó que presentaron la semana pasada tratar el aumento salarial a los trabajadores, informes de Bromatología Municipal ante lo que comen los chicos en las escuelas y “ellos lo votan y a la semana siguiente no lo quieren tratar”.
“Tenemos la costumbre del Consejo de brindar a la palabra a todos los ciudadanos, o sea, no hay ciudadanos de primera, de segunda o de tercera categoría, es a todos, hubo personas que cuando éramos oficialismo se expresaron en contra de políticas que implementamos y estaban en su derecho”, remarcó.
Gatto recordó que el año pasado “votamos que los trabajadores que cumplían con los requisitos pudieran ingresar a la planta permanente y se aprobó con votos de quienes no eran del oficialismo también”.
Y agregó que, tras asumir la presidencia Agustina Arancibia Rodríguez “da de baja esas plantas permanentes que votó el cuerpo, esto es ilegal y las personas que dejaron sin trabajo de manera injusta hacen un amparo, que es un juicio rápido piden una medida cautelar con requisitos particulares para atender a situaciones de vulnerabilidad de derechos”.
La jueza dispone la reincorporación inmediata de 14 trabajadores con fecha del 1 de enero hasta la actualidad, que es 26 de abril, “estas personas nunca fueron reincorporadas”, remarcó.
Qué se iba a tratar en la sesión del Concejo de este jueves
En este sentido, la concejal opositora enumeró los procedimientos ilegales que se están realizando en el Concejo barra Municipio como “cantidad de despidos, bajar de la planta permanente a otros trabajadores, la forma de tratar el empréstito, entre otros”.
La concejal dijo que en la sesión de este jueves se iban a tratar los proyectos para que se declare la emergencia del dengue y se reclame por el Tratado de La Toma porque el intendente Gastón Hissa dijo que “no tenía dinero para pagar los sueldos y los desdobla, pero por voluntad propia incorporo un ítem municipal donde absorbe el dinero en vez de reclamarlo”.
Y ejemplificó: “Un empleado municipal de la categoría más baja cobra alrededor de $370.000, el Tratado de La Toma garantizaba que nadie cobrará menos de $300.000, Hissa reclama ese Tratado más el ítem que pone de dinero, que evidentemente tiene, llega a un sueldo por lo menos de $700.000”.
